Revista Digital

41

enero – abril 2021

Entrevista con Santos Bustillos, migrante hondureño

revista digital

41

enero – abril 2021
índice

Albergue La Sagrada Familia, Apizaco, Tlaxcala. 
11 de noviembre de 2015

PJ: ¿De dónde vienes?
SB: De Honduras.

PJ: ¿De qué parte de Honduras? 
SB: Olanchito.

PJ: ¿Cuántos días tienes ya de viaje?
SB: Tengo dieciséis días de haber salido de mi país. 

PJ: ¿Allá a qué te dedicas?
SB: A la agricultura.

PJ: Tu trayecto de la frontera para acá, ¿cómo lo has hecho? 
SB: Lo he hecho, cierta parte en combis y cierta parte por el monte, caminando, porque venimos huyéndole a la migración. Realmente en el camino hay muchos ladrones y sufrimos parte de eso, por ejemplo, a mí me asaltaron aquí del palomar para acá, me pusieron un machete, una pistola, asaltándome me quitaron el dinero y enseguida nos dijeron que nos largáramos de juida para un cerro, y nos fuimos de juida para el cerro, ya luego después de media hora salimos otra vez para el ferrocarril, para agarrar otra vez nuestro camino y nuestro trayecto. De allá para acá nos hemos venido en el tren y aquí estoy descansando en esta Casa del Migrante.

PJ: ¿Te acuerdas en qué estación tomaste el tren?, ¿en qué parte? 
SB: El tren lo he agarrado de Medias Aguas para acá, de Arriaga no, lo he hecho simplemente a pura pata. 

PJ: ¿Cuántos días caminaste? 
SB: Como unos cinco días, de cinco a seis por allí.

PJ: ¿Qué tal el calor? 
SB: Bueno, en el día sí hace un poco de calor, pero en las noches está fresco para nosotros, friíto. Eso hemos venido aguantando, frío, hambre, sed, todo eso. El camino es muy duro para nosotros, pero, la verdad de las cosas es que nos la hemos venido arreglando para llegar a los Estados Unidos. Hasta acá hemos llegado, porque en nuestro país no se puede vivir, no hay trabajo, la Mara nos hecha juida de allá, nos quitan el dinero, si no se los damos nos sentencian, que nos van a sacar de nuestras casas y a otros los matan. Entonces, eso es lo que nos hace migrar de allá de nuestro país. 

PJ: En el campo, ¿en qué trabajabas o qué cultivabas? 
SB: Maíz, frijoles. 

PJ: ¿En propio o trabajando para otro? 
SB: En propio.

PJ: En cuanto a la experiencia en la cuestión migratoria, ¿tú has estado en alguna otra ocasión en Estados Unidos, o es el primer viaje? 
SB: No, ya he estado en Estados Unidos. Entré la primera vez y me deportaron, esta es la segunda vez. 

PJ: ¿De dónde te deportaron? 
SB: De Austin, Texas. 

PJ: ¿Adónde te dejaron? 
SB: De allí me deportaron rumbo a mi país, a Honduras. En avión, sí en avión, a los hondureños los deportan en avión, directamente a Honduras, y yo aquí voy, nuevamente.

PJ: ¿Tienes algún contacto allá, un familiar que tengas? 
SB: Sí, de familia una hermana, primos, tías.

PJ: ¿En qué parte? 
SB: En Austin, Texas.

PJ: De tus familiares, ¿quiénes se quedan en Honduras?
SB: Pues mis hijos, mi mamá ya murió, nada más tengo mi papá y mis hijos, más que todo mis hijos.

PJ: ¿Cuántos hijos tienes? 
SB: Cinco. Tengo seis por todos. Tengo una hija en Estados Unidos con una mexicana, pero está en Estados Unidos, y en Honduras tengo cinco. Seis por todos los que tengo. 

PJ: Ahorita ¿cómo crees poder llegar a la frontera? 
SB: Pues, realmente voy a ver si puedo llegar a la frontera, siempre agarrando el tren, porque realmente dinero no tenemos. Lo poquito que conseguimos, pidiendo, vamos comprando nuestra comida, nuestra agüita, y ciertamente aquí, en partes de México nos regalan mucha comida, agua y así vamos poquito a poquito, hasta que lleguemos a la frontera, aunque con sacrificios vamos en el tren, allí vamos. 

PJ: La primera vez que fuiste a Estados Unidos, ¿alcanzaste a trabajar algo? 
SB: Sí, si alcancé a trabajar, estuve cinco años. Trabajé algo e hice algo en Honduras, pero lo que hice no lo logré, porque lo mandábamos a nuestra mujer y nuestra mujer lo gastó con otro. No pude lograr lo poquito que yo hice con ella, y aquí voy de vuelta para ver si puedo lograr algo, trabajar para hacer nuestro dinerito, simplemente vivir un poquito más mejor. 

PJ: ¿En qué trabajabas en Estados Unidos? 
SB: En plomería. 

PJ: ¿Con algún conocido? 
SB: Con contratistas. Con un contratista de aquí de México, trabajaba con él bien, de plomería. 

PJ: ¿Qué tal el trato?, ¿él cómo te trataba? 
SB: Fue un trato muy bueno, él era muy buena persona. Sí, ahorita que voy, yo creo que tengo todavía el trabajo con él, está seguro al llegar, pero aquí vamos. Dios quiera que nos ayude, llegar a nuestro camino, esa es la ilusión que tenemos, llegar allá. 

PJ: ¿Dices que ya tienes más o menos dieciséis días de viaje? 
SB: Sí, dieciséis días de haber salido de mi país, y yo pienso estar diez u once días para llegar a la frontera, si Dios me ayuda también.

PJ: ¿En qué parte de la frontera entraste? 
SB: Por Tecúm, Tecúm Umán,  de allí Tapachula, de Tapachula llegué a Arriaga, de Arriaga a un pueblito que no sé cómo se llama, de allí logré llegar hasta Medias Aguas, de Medias a Tierra Blanca, de Tierra Blanca a Orizaba y de Orizaba hasta aquí (Apizaco), que no sé cómo se llama (el entrevistador le da el nombre del lugar). De aquí pienso llegar hasta el Distrito, del Distrito hasta Huehuetoca y de allí no sé cómo se llama el pueblito de más adelante. (El entrevistador le comenta: creo que de aquí es más fácil que llegues a Huehuetoca). 

PJ: De los niños que dejaste en tu país, ¿qué edades tienen? 
SB: La mayor tiene 23 años y la que le sigue, año a año están mis hijos, pues la que le sigue, la mayor ya se me casó, la menorcita, la chiquita tiene 16 años. Esa la tengo en el colegio, la tiene que me vine mi papá, ahorita la dejé en el colegio, pero mi padre la atiende. Por eso pretendo llegar, para ayudar a mis hijos, que mis hijos estudien. La mayor gracias a Dios ya se graduó este año y piensa poner allá, no sé cómo se llama “curla”, otro nivel más grande que sigue estudiando. Gracias a Dios si llego la pongo a estudiar más, aunque yo no logré sacar ni mi sexto grado, pero yo pongo a estudiar a mis hijos para se preparen; y hacer mi casita para ellos. 

PJ: Y esta muchacha que está en Estados Unidos, ¿ella ya también trabaja? 
SB: Sí, ella trabaja, una hermana mía también está trabajado. Sí, gracias a Dios estando yo en Estados Unidos le ayudé yo para que entrara, entró y ahora ella está allá y a mí me agarraron, me mandaron para acá a Honduras y ahora voy de vuelta. 

PJ: ¿Cómo es que te agarraron? 
SB: Pues la verdad de las cosas venía trabajando. Venía de trabajar ya muy de noche y ya me estaba pasando del departamento y enfrené mucho el carro y chilló, y enfrente estaba el policía, como vio que chilló me alumbró con la luz y me pararon, y como era indocumentado ya me arrestó y ya me mandaron para mi país, me pusieron en la corte de migración y me fui. 

PJ: ¿En qué año fue?
SB: Este año, hace un año ya que me deportaron. Gracias a Dios aquí voy de vuelta, sufriendo, pero aquí voy. 

PJ: Con este patrón o contratista, ¿en qué horario trabajabas? 
SB: Trabajaba hasta seis u ocho de la noche, el contratista me daba las casas por contrato, depende de la hora que terminara y a esa hora salía, entre más hacía más ganaba, mi hora de salir era de siete u ocho de la noche. 

PJ: ¿Desde dónde te deportaron?, ¿te enviaron directamente a Honduras?  
SB: Sí, directamente hasta Honduras.

PJ: ¿Aquí en México no los han detenido, a ti en este momento? 
SB: Sí, bajándome de la combi. Como vio migración que me estaba bajando y me hecho juida, me fui al monte y ya no nos siguieron, solamente así me escapé de migración. Hemos visto acá más adelante, pero no nos han echado juida, a mí y a mis amigos, pero a ellos sí, la policía pues sí me ha parado, que traigo una mochilita y ven todo, me ha preguntado que a dónde soy y han preguntado por mi identificación y nada más, sólo eso. 

PJ: En las noches, ¿dónde te quedabas? 
SB: En las noches, a veces cuando venía caminando por el monte, pues me quedaba dormido en el monte aguantando el frío y todo, pues en el pueblo no me podía quedar porque no podía pagar un hotel. Entonces me tenía dinero, me tenía que quedar en las vías del tren y allí me dormía, nada más que escondido más en el monte, y así he venido, es un camino muy duro para nosotros, pero aquel que no arriesga no triunfa.

PJ: Entonces, con los policías, ¿solamente te preguntó de dónde eras? 
SB: Sí, me preguntó de dónde era y mi identificación, enseñárselo yo para así mirar y estar seguro de donde venía. Me hizo preguntas de migración, que sí tenía, que sí conocía a la policía. Les dije que sí, me preguntaron de qué color vestían ellos, la troka que traían, como ya las conozco yo les dije que verde con rojo y blanco la troka, y qué color vestían ellos, que de color blanco también ellos, y del pantalón que traían, un pantalón payolito, algo así su pantalón, ya me dijeron: está bien, sigue tu camino y que te vaya bien. 

PJ: De allá de la salida de tu país, ¿venías con alguien más, con más paisanos? 
SB: Sí, en el camino nos hemos juntado. Salí solo, pero en ese camino nos hemos juntado con muchos otros, luego nos juntamos con unos hermanos y ya aquí en México ya vamos juntos, nos acompañamos uno y otro, nos vamos echando ojo uno a otro, uno para allá y otro para acá, mirando a ver qué se mira adelante, que paseen el camino, teniendo cuidado al subirse al tren porque los garroteros nos bajan a algunos, otros para poderse subir les piden dinero, y uno por venirse en el tren lo poquito que trae uno de dinero se los da uno, por dejarme subir, y así venimos, peleando contra todo, pero con fe se puede triunfar.

PJ: Tu expareja mexicana, ¿está en Estados Unidos o aquí, en México? 
SB: Ella está en Estados Unidos, pero ya con ella me dejé, antes de deportarme me dejé y no la he vuelto a mirar a ella ni a mi hija, ahora que llegue si acaso me da oportunidad nuestro Señor de volver a ver a mi hija.

PJ: ¿Dices que los que se quedaron en tu país están con tu papá? 
SB: Pues la pequeña está con mi papá, la mayor la tengo en San Pedro, trabajando por el momento, y pienso llegar a Estados Unidos para poner a estudiar a ella, y a la que se casó pues está con su esposo, y tengo otro varón que está en el ejército. 

PJ: ¿De cuántos años el muchacho? 
SB: Él tiene 19 años ya.

PJ: ¿Él trabaja allí, en el ejército?
SB: Pues él anda sirviéndole a la patria, les pagan, no sé cuánto les pagan a ellos.

PJ: En el tiempo en que trabajaste allá, en tu país, ¿los terrenos eran tuyos o de tu familia o de algún otro? 
SB: No, los terrenos eran de nuestro padre. Allí me daba de aparcero y trabajaba poquito para mí, los trabajaba y de allí me mantenía. El producto que sacaba lo vendía y otra parte lo dejaba y con eso me mantenía.

PJ: ¿Qué es lo que, principalmente, se cultiva allí?
SB: Lo que se cultiva en su mayor parte es el frijol y el maíz, sí, eso es lo único que cultivaba.

PJ: ¿Cómo es el clima allá, con respecto, por ejemplo, a acá?
SB: El clima ya en tiempo de verano es un clima muy fuerte, ya para noviembre, diciembre y enero, pues ya bajó, ese es el detalle.


Descargar artículo